Relajación Cambios a la hora de ligar Aventuras para gente sin pareja Tener pareja no quiere decir que hagamos todo juntos, vacaciones incluidas. En ocasiones, simplemente porque no coinciden las fechas o porque apetece disfrutar de un viaje de forma diferente saliendo con amigos, por ejemplopodemos pensar que un plan para singles puede ser una opción estupenda. Hay muchos solteros, claro, pero también separados, viudos, divorciados o independientes. Desde un plan para nadar con delfines en las Maldivas o el Mar Rojohasta un plan con actividades nocturnas por tierras holandesas. Pero si algo triunfa en este tipo de viajes son los cruceros, o así lo afirman desde Solteros de Viajeespecialistas en el sector single. De hecho, el perfil tipo en un viaje para singles es una mujer en torno a los 40 años que elige irse de crucero.
Bounce Next El héroe discreto narra la historia paralela de dos personajes: el ordenado y entrañable Felícito Yanaqué, un pequeño empresario de Piura, que es extorsionado; y de Ismael Carrera, un exitoso hombre de negocios, dueño de una aseguradora en Lima, quien urde una sorpresiva venganza contra sus dos hijos holgazanes que quisieron verlo armatoste. Ambos personajes son, a su guisa, discretos rebeldes que intentan hacerse consignment de sus propios destinos, pues baza Ismael como Felícito le echan un pulso al curso de los biografía. Un libro lleno de humor, cheat elementos propios del melodrama, donde Piura y Lima ya no son espacios físicos, sino reinos de la fantasía poblados por los personajes del gran escritor que es Mario Vargas Llosa. Vivía en el centro de Piura y en la calle Arequipa había ya estallado el bullicio de la ciudad, las altas veredas estaban llenas de gente yendo a la administración, al mercado o llevando los niños al colegio. Algunas beatas se encaminaban a la catedral para la culto de ocho. Los vendedores ambulantes ofrecían a voz en cuello sus melcochas, chupetes, chifles, empanadas y toda suerte de chucherías y ya estaba instalado en la esquina, bajo el guardabarros de la casa colonial, el ciego Lucindo, con el tarrito de la limosna a sus pies. Todo gemelo a todos los días, desde tiempo inmemorial.